sábado, 12 de noviembre de 2011

Dios sigue estando ahi

Considero que no es de provecho “discutir” sobre Dios con personas que tienen otra fe, ó con quienes se dicen no tener fe. Lo pienso así porque la sociedad de hoy esta llena de prejuicios anti católicos y creo que si les hablo no lo entenderían por el simple hecho de que el prejuicio vela el entendimiento, mas bien, soy de la idea de saber dar respuesta a todos los cuestionamientos posibles y esperar en Dios el tiempo de cada persona pues la decisión no es mía sino de ellos, yo comparto y soy firme en lo que creo aunque en los hechos tenga debilidades (quien diga que cumple al cien por ciento los mandamientos ó es un mentiroso ó es un ignorante).

En lo personal pienso que nadie es ateo por vocación ó inspiración, mas bien quien se dice ser ateo lo es por convicción, por argumentos, conceptos e ideas. Hace poco me toco platicar por medio de Internet con el autor de un libro “ateísta” (aunque en la realidad después me confeso ser agnóstico). Le hable de la existencia de Dios, que no es una fantasía que este fuera de nuestra realidad. Para darle algunos ejemplos, le mencione el diseño de la creación. Los arquitectos sabemos lo que es la “sección áurea”, esto es, una proporción en el diseño, esta proporción se encuentra en toda la naturaleza, desde las hojas de los árboles, el cuerpo de los animales, incluso hasta nuestro cuerpo esta diseñado de tal forma; “mano, antebrazo y brazo”, tienen una proporción entre: “cabeza, tronco y piernas”, y estas, están en proporción con: “pierna, espinilla y pie”, que están en proporción con: “frente, ojos-boca y mentón”. La proporción áurea es “1.6180”, algunos la llaman “la divina proporción”. El ateo afirmaba que esto no era evidencia de la existencia de Dios, a lo que respondí que tampoco “su opinión” de la sección áurea era evidencia valida para negar a Dios. De nuevo, di otro ejemplo: “¿Puedes dar evidencia del pensamiento?, supongamos que tu escribes un poema con tinta sobre un papel, ¿dime que hay?; ¿un poema ó tinta sobre el papel?, si lo vez con un microscopio solo veras tinta y papel, si le preguntas a un niño te dirá que es un papel con letras, incluso, si invitas a una persona que no sabe apreciar la poesía su lectura será vana y sin comprensión, pero aun así, independientemente de las limitaciones del receptor ¡el poema sigue estando ahí!. Por otra parte, ¿Qué pensarías tú, si un estudio forense afirmara que “el pensamiento” no existe, pues, tras 100 autopsias realizadas jamás se ha encontrado evidencia tangible?, dicho estudio por mas racional que parezca ¡es absurdo!. Para el ser humano el pensamiento existe porque tenemos la capacidad para asimilar su existencia, pero un animal no tiene la capacidad de razón para afirmar que existe y que no. El pensamiento no es táctil, pero, cuando es expresado si hay evidencia de el, y aun así, existen pensamientos que nunca fueron expresados y aunque no existan receptores ese pensamiento si existió. Dios no puede ser visto, ni tocado porque Dios es infinito, si Dios pudiese ser visto y tocado seria finito. La analogía del “pensamiento no expresado” nos ayuda a comprender que existen cosas fuera de la evidencia tangible y visible, no todo lo que existe es visible y tangible.

Fuera de la plática con el ateo, creo que en ocasiones el “concepto de Dios” es comprendido fácilmente, aunque en el raciocinio de la comprobación no lo hayamos alcanzado aun. Termino esta reflexión con un ejemplo análogo; “el átomo” fue un concepto del atomismo griego (una mezcla entre química y filosofía, V a.C.), la existencia del átomo pudo demostrarse hasta el siglo XIX, antes de esto, el átomo era un “dogma”. El concepto del átomo fue entendido muchos siglos antes de su comprobación. En ocasiones es más fácil comprender la existencia de Dios por introspección y vocación que por un método racional esperando comprobación. El poema de Dios esta escrito en la creación, nosotros como limitados receptores estamos en proceso para comprenderlo y no tanto razonarlo. El poema de Dios sigue estando ahí.