Hace tres años falleció mi abuelo y a raíz de este acontecimiento la salud de mi abuela empeoró y hace poco falleció. Mi abuelo cuando entendió que ya en su vejez necesitaba quien los atendiera, le pidio a su hija y yerno mudarse a dicha ciudad para que ellos los atendieran. El yerno estaba por juvilarse, y aceptó la propuesta del abuelo, tomó a su esposa, se mudo de ciudad, para antender entre el y su esposa a los dos ancianos. El yerno pretendía usar su juvilación para dedicarse a la siembra y así lo hizo mas no fue lo que el esperaba, tambien puso un negocio pequeño y no le reditruo y lo cerró.
La pensión de mi abuelo no alcanzaba para gran cosa, y a él nunca le gustó pedir prestado pero mi mamá le ayudaba. A pesar de que mis abuelos tuvieron muchos hijos, solamente sus dos hijas y sus maridos tomaron la responsabilidad de cuidar a los ancianos, unos lo hacian físicamente y los otros aportando economicamente. Un dia internaron a mi abuelo y se reunieron todos los hijos, el dia que entró al quirofano ese dia murió. Todos los hijos se lametaban por la muerte, pero solo el yerno y su esposa conocian el peso que es cuidar de un familiar en su vejez.
El alzheimer que padecía la abuela tras la muerte de su esposo se multiplicó. Conforme pasaban los meses su memoria se deterioraba mas, no reconocia a sus hijos, incluso llego a no reconocer a las personas que vivan con ella. Mi familia la visitaba seguido, antes hablaba, te conocía, repetia mucho las frases que ya habia mencionado, despues no sabia quien eras, hasta que llegó el momento que pareciera que conviviamos con una desconocida porque su mirada era distinta.
Apartir de este año mi abuela se vino abajo, estuvo unas semanas en hermosillo y ahí fue donde mi familia la cuido. Nunca habia estado tan de cerca en sus cuidados, mi abuela y no hablaba, ni podia atenderse sola, mi mama la baño, le dio de comer, la peino, era parecido a la anteción que requiere un bebé. Cuando se la llevaron a su ciudad, le dije a mi tia (quien la cuidaba), que a pesar de que la abuela estaba enferma uno comienza a extrañarla.
En una ocasión, visitamos la ciudad de mi abuela y estando con el yerno que es mi tio, me dijo: “A tu abuela no le queda mucho tiempo”, yo conteste: “si, parece que cada vez es mas obvio, ¿Qué harás el dia que muera?, ¿te regresarás a tu ciudad para ver a tu hijo?”, “no se” me contestó. Esa misma semana, la abuela se puso mal, se la llevaron en una ambulancia y a los dias falleció. Otras vez se juntaron todos los hijos, la velaron en su casa y todos se acordaron de ella el dia que la enterraron.
Estando en el patio en casa de mi abuela, alguien se me acerco y me pregunto; “Juan, ¿Cómo te sientes?”, y dije: “Los dias finales de mi abuela fueron para mi de gran enseñanza, ella me enseño a ver el futuro de una generación, pues, ¿porque pareciera que a nuestra generación ya no le gusta tener hijos?, ¿no queremos mortificaciones?, ese egoismo nos va alcanzar el dia de nuestra vejez, si teniendo hijos hay ancianos solos, ahora imaginense ¿Quién ayudara a un anciano que cuando fue joven no tuvo hijos por no quierer lidiar con ellos?. La familia es un proyecto para la vida, tiene un propósito y es bueno. Quien ama a Jesús guarda el mandamiento, “Honraras a tu padre y madre”, hay que amar a Dios primero, y a la familia en atención al Dios que nos ama.
