sábado, 3 de julio de 2010

¿Quién te ha dado mas?


Hace algunas semanas escribía sobre Moisés y su llamamiento para liberar al pueblo de Israel de la esclavitud de Egipto por medio de señales y milagros. Éxodo relata la primera entrevista de Moisés y Aarón con el Faraón:

“Dios advirtió a Moisés y a Aarón: Si Faraón les pide algún signo o milagro. Tú dirás a Aarón que tome su bastón y lo lance delante de Faraón, y se cambiará en serpiente.". Se presentaron Moisés y Aarón a Faraón, hicieron lo que Dios les había ordenado, y, al echar el bastón delante de Faraón y de sus ministros, éste se convirtió en serpiente. Faraón entonces llamó a sus sabios y brujos, los cuales hicieron algo semejante con sus fórmulas secretas; Arrojando todos ellos sus bastones, también se convirtieron en serpientes; pero el bastón de Aarón devoró a los de ellos” (Éxodo 7: 8-12).

Que interesante es leer que los brujos del Faraón también pudieron convertir sus varas en serpientes, supongo que la duda invadió a Moisés y Aarón en esos precisos instantes pues fueron a mostrar una señal y la misma señal les dieron, pero aun así, la vara de Aarón venció. Que incertidumbre debió ser para muchos hebreos antiguos el verse en la disyuntiva de elegir entre los acontecimientos inexplicables, llámese brujería, ilusión ó fenómenos naturales, es lógico preguntarse: ¿a quien se debe obedecer? ¿al mas poderoso?, de ahí el politeísmo. Un pleito semejante al de Moisés y el Faraón, podrá ser encontrado en el relato del profeta Elías contra los cuatrocientos profetas del dios Baal. En aquella época el pueblo creía en el poder de Baal, tanto que Elías cuestiona al pueblo y les decía: ¿Decídanse a quien quieren seguir? ¿Si a Baal ó a Dios?. El profeta manifiesta en medio de la multitud que el Dios de los Hebreos esta por encima de todos los dioses paganos. A partir de este relato las sagradas escrituras denotan a los dioses paganos como ídolos sin vida y sin capacidad, mostrándole al mundo la existencia de un solo Dios verdadero.

Si analizamos el mundo actual, ¿Qué acaso no vemos en nuestra sociedad moderna los mismos rudimentos?, gente buscando milagros por medio de la brujería, el tarot, los hechizos, las pócimas. Cuantos se preguntaran: ¿a quien debemos seguir? ¿a quien le debemos fidelidad?, ¿debemos seguir aquella magia de donde brote cualquier tipo de milagro?, la respuesta es no.

Pienso que la mayoría de nosotros solo nos enfocamos en aquello que esperamos recibir, y no ponemos atención en aquello que nos ha sido entregado. La viuda pobre entrego solamente “dos” monedas como ofrenda a Dios, y Jesús dijo que aquella mujer había entregado todo lo que tenia (Lucas 21:4). Cuando las personas buscan recibir en la magia ó en la brujería un beneficio, se olvidan que Dios pudiendo obrar cualquier prodigio decidió hacer una obra aun mayor, y a diferencia de la viuda, Dios no entrego todo lo que tenia, sino ¡aquello que mas amaba!. “Este es mi hijo amado, a este oíd” (Mateo 3:17) ó “De tal manera amo Dios al mundo que dio a su único hijo…” (San Juan 3:16).

Si recordamos a Cristo y su agonía en la cruz muchos esperaban verlo obrar algún milagro como en los tiempos de Moisés ó Elías. Quien se vuelve a la magia y a la brujería, ya no distingue entre la magia de Egipto y el amor de Jesucristo.